Lo mejor de esta semana fue mi viaje relámpago a Nueva York para moderar el almuerzo anual que todos los años ofrecen las publicaciones Broadcast Cable & Multichannel News durante la Cumbre de la Televisión Hispana. ¡Y el mismo estuvo Al Rojo Vivo!
Hace 14 años cuando comenzó este Hispanic Television Summit – como se le conoce en inglés – fui la primera en recibir el Premio por legado a la Televisión Hispana. ¿Y adivinen qué? En esta ocasión, ese honor recayó nada menos que en manos de mis queridos amigos Raúl De Molina y Lili Estefan.
Me encantó porque el almuerzo fue auspiciado por mi cadena Telemundo, que no tuvo reparos en que se les entregara ese tan merecido reconocimiento. Una vez más, quedó demostrado que, a pesar de la aparente rivalidad que pueda haber en pantalla, cuando se apaga la tele, hay un gran respeto y cariño entre colegas.
En mi caso también hay una gran amistad tanto con El Gordo como con La Flaca. ¡Hasta me encargué de filmarlos en video cuando estaban en el podio para que tuvieran las imágenes de recuerdo!
Mi jefe, César Conde, recibió el primer premio que se le concede al ejecutivo que más ha aportado para lograr una diferencia positiva en la industria. Es un premio que se continuará otorgando en los próximos años.
Como parte de los eventos de la cumbre televisiva, tuve oportunidad de compartir un panel con Chiquis Rivera en el que hablamos sobre el acuerdo al que llegó Jenni Rivera Enterprises con Telemundo y nuestra cadena hermana, NBC Universo. Mediante ese acuerdo tendremos, entre otras cosas, los derechos exclusivos de transmitir la única serie biográfica autorizada sobre la vida de la Diva de la Banda. ¡Un gran honor sin duda!