Es increíble los alcances de algunas personas que desean aprovecharse de la buena fe de otros. Miren atentamente este video, el cual muestra claramente lo que esta vendedora de pescado hace después de pesar el pedido que escogen los clientes. Lo más asombroso es que lo que hace, lo hace con una destreza tal, ¡que evidencia su nivel de práctica! Quién sabe desde cuándo lo hace y ya se convirtió en una experta de la trácala. Hay que estar siempre atentos cuando uno va a este tipo de mercaditos, donde la única regulación es la honestidad, y ésta, desafortunadamente, no siempre existe.