La celebración de Thanksgiving o Acción de Gracias implica reunión familiar, alegría, agradecimiento y… ¡mucha comida! Para los miembros de la familia de cuatro patas (es decir, las mascotas), el aroma de la comida es una tentación difícil de resistir. Pero es nuestra responsabilidad asegurarnos de no darles alimentos que puedan hacerles daños graves e incluso, irreparables.
Los veterinarios sugieren prestar especial atención a este tipo de comidas:
1. Huesos: Una de las razones más comunes por las que los perros son llevados a salas de emergencias durante las fiestas es por haber comido huesos de pollo o pavo. Éstos bloquean las vías respiratorias y digestivas, y son particularmente peligrosos porque son frágiles, quebrándose con facilidad, creando astillas que pueden clavarse en los tejidos.
2. Pavo: Darles aunque sea un pedacito de pavo a un perro o gato puede producir pancreatitis, una condición que puede causarles la muerte. Y ni hablar de comer pavo crudo, ¡ya que podrían infectarse de salmonela!
3. Masa cruda o mezclas de pasteles crudas: Ingerir cualquier cosa que contenga huevo crudo es peligroso para animales y seres humanos por el riesgo de infectarse de salmonela. Adicionalmente, la levadura presente en las masas de panes y pasteles puede ser muy peligrosa para las mascotas porque puede crear dolorosos gases e hinchazón.
4. Dulces sin azúcar o “sugar-free”: La gran mayoría de los productos “sugar-free” contienen Xylitol, una sustancia muy dañina para los perros que incluso puede ser letal. ¡Así que hay que estar muy pendientes y mantenerlos fuera del alcance de las mascotas!
5. Cebollas, chocolates, uvas pasas y uvas: Muchos ya sabemos que estos alimentos son dañinos para los perros, pero existen muchos platos en el menú de Acción de Gracias que los contienen, por lo que hay que prestar especial atención antes de bajar la mano a darles una probadita.
Los peligros durante la celebración de Thanksgiving no se limitan sólo a la comida. Cuando la celebración incluye un gran número de invitados, puede que las mascotas se pongan nerviosas e incluso agresivas. Una buena idea es mantenerlos en un lugar seguro de la casa, con comida y sus juguetes favoritos para reducir el estrés emocional que puedan sentir.
Lo mismo ocurre con las decoraciones; éstas pueden representar un daño oculto para las mascotas. Me refiero a cables eléctricos, velas, piezas decorativas plásticas y llamativas que pueden lucir como juguetes para ellos, e incluso algunos tipos de plantas.
Gracias a los veterinarios expertos que nos han otorgado esta valiosa información, ahora podremos tener una celebración con alegría y seguridad para todos, ¡incluyendo a nuestras mascotas!